Empresarios reprueban homologación de salarios
mínimos
Periódico el Economista – 27 de Nov.
En la recta final de su sexenio, el presidente
Felipe Calderón ahora incidió en el tema salarial para lo cual ajustó el
salario mínimo en la zona “B” a la “A” del país, lo que no sólo complicará la
negociación de los mínimos a partir del primero de diciembre entre patrones,
sindicatos y el gobierno, sino que violenta el Estado de Derecho, según el
Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
El CCE reprobó de inmediato dicha acción de
desaparecer la zona“B”, por las implicaciones que generará en la fijación del
salario mínimo del 2013.
“A sólo unos días del cambio de administración,
el Ejecutivo Federal rompe los equilibrios y la armonía que nos ha unido con el
sector obrero, con quien durante más de nueve años hemos sostenido acuerdos por
la vía del consenso en esta materia”, afirmó Gerardo Gutiérrez Candiani,
presidente del CCE.
El sector patronal que encabeza Juan Pablo
Castañón advirtió que elevar los salarios sin un crecimiento real de la
economía que lo sustente, puede generar desequilibrios macroeconómicos
innecesarios.
La Confederación Patronal de la República
Mexicana (Coparmex), como representante del sector patronal ante la Comisión
Nacional de Salarios Mínimos establece: “No hay atajos para el crecimiento
económico, México tiene hoy bases económicas sólidas y goza de la confianza de
los inversionistas mundiales. Para convertirnos en una economía líder, se
requieren reformasestructurales, como la hacendaria y energética, que
establezcan las bases de un crecimiento sostenido y sustentable, que derrame
una mayor riqueza para todos los mexicanos”.
El ajuste implica la desaparición de la Zona
"B", a la que están adscritos diversos Municipios de Nuevo León,
Jalisco, Tamaulipas, Sonora y Veracruz, y su integración a la Zona
"A", lo que implica un aumento de 2.9% al salario mínimo en dichos
Municipios, estableció el sector empresarial.
“El llevar a cabo una rezonificación abrupta,
por encima del procedimiento y de los tiempos marcados por la Ley, además de
violentar elEstado de Derecho, dificulta la relación entre los sectores productivos
y por ende sienta un precedente negativo para la negociación de salarios
mínimos que en los términos legales iniciará a partir del 1 de diciembre”,
afirmó el CCE.
Consideramos, abundó Gutiérrez Candiani, que
-por sus implicaciones- esta resolución debiera haberse dado en un marco de
estricto apego a derecho y habiendo agotando cabalmente cada etapa del proceso
aplicable, lo que hubiera permitido llegar a acuerdos que privilegien la
estabilidad económica, la competitividad de las empresas, el prestigio de las
Instituciones y el beneficio de los trabajadores, todo lo cual fue pasado por
alto por la STPS.